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Descripción

Un texto es una forma de atentado, en el sentido en que dinamita lo establecido, rompe con las seguridades preexistentes e instaura una nueva realidad, precursora, casi siempre más angustiante que la anterior. En las situaciones de peligro extremo, escribir es una manera de poner distancia de la tragedia, es digamos, un ansiolítico natural que nos regala el psiquismo para no sucumbir a la angustia.

Nuestra época, y nuestros contemporáneos, encarnan el déjà vu de un antisemitismo desinhibido como una forma de enfermedad social renovada, esta vez, bajo el signo del Bien y con el aval del campo cultural, cuándo no. El arte es también criminal, sobre todo cuando se proclama en nombre del Bien. Los relatos de Tali Goldman marcan una ruta posible en el mapa actual, una ruta policíaca, sin impostura, que investiga historias de vidas argentinas, judías, bajo la dictadura militar de Videla y el atentado a la AMIA.

En Cómo se puede querer tanto a alguien, las diversas crónicas se encastran como una Mamushka. Diana Malamud pierde a su marido en la AMIA y queda viuda con dos hijas. Pero antes de todo eso, en 1976, se exilia después de un terrible allanamiento en su casa y logra huir gracias a un operativo secreto, liderado por Dany Recanati. Un israleí que arriesga su vida y la de su familia para salvar a 400 argentinos judíos de la feroz dictadura en Argentina. Esa misma dictadura es la que arrebata a Ezequiel Rochistein del vientre de su madre. Décadas después, ya abogado y trabajando en la Fuerza Aérea, descubre que su identidad es otra: no es hijo de un militar, sino uno de los nietos buscados por Abuelas de Plaza de Mayo. En 2020, en plena pandemia, Ezequiel recibe una misión secreta que lo conecta con su pasado más hondo.

Como un documental en prosa, la escritura de Tali Goldman, nos muestra la aventura de los infiltrados, los agentes secretos y personas con falsas identidades, de ahí su valor testimonial pero también literario, en una época de enajenación de las identidades.

Ariana Harwicz