1 cuota de $24.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $24.000 |
2 cuotas de $14.338,80 | Total $28.677,60 | |
3 cuotas de $9.956 | Total $29.868 | |
6 cuotas de $5.676,40 | Total $34.058,40 | |
9 cuotas de $4.221,33 | Total $37.992 | |
12 cuotas de $3.552 | Total $42.624 |
1 cuota de $24.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $24.000 |
3 cuotas de $8.630,40 | Total $25.891,20 | |
6 cuotas de $4.643,20 | Total $27.859,20 | |
9 cuotas de $3.329,33 | Total $29.964 | |
12 cuotas de $2.684,40 | Total $32.212,80 | |
18 cuotas de $3.152 | Total $56.736 |
6 cuotas de $5.448,80 | Total $32.692,80 | |
12 cuotas de $3.622 | Total $43.464 |
1 cuota de $24.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $24.000 |
3 cuotas de $8.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $24.000 |
6 cuotas de $4.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $24.000 |
3 cuotas de $8.909,60 | Total $26.728,80 | |
6 cuotas de $4.939,60 | Total $29.637,60 |
3 cuotas de $9.493,60 | Total $28.480,80 | |
6 cuotas de $5.406,40 | Total $32.438,40 |
9 cuotas de $4.267,47 | Total $38.407,20 | |
12 cuotas de $3.702,40 | Total $44.428,80 |
9 cuotas de $4.936,53 | Total $44.428,80 | |
12 cuotas de $4.449,80 | Total $53.397,60 |
Anna Ajmátova nació el 23 de junio de 1889 en Odessa y murió en las afueras de Moscú, el 5 de marzo de 1966. Pasó su infancia y adolescencia en Kiev hasta que se mudó a San Petersburgo. Perteneció a uno de los movimientos poéticos más interesantes del Siglo de Plata ruso: el acmeísmo. Estuvo casada con Nikolai Gumiliov, acusado de conspiración durante la Revolución Rusa y asesinado. Su hijo estuvo en la cárcel numerosas veces y su último marido, Nikolai Punin, murió en un campo de concentración. Durante años Ajmátova fue perseguida por el régimen estalinista y su obra fue censurada, sin embargo, la poeta no quiso abandonar su país y sufrió junto a su pueblo la tragedia y la falta de libertad.
¿Hubiera podido Beatriz escribir como Dante
o Laura glorificar las penas de amor?
Yo le enseñé a hablar a las mujeres
pero, Dios mío, ¡cómo hacer que se callen!
Anna Ajmátova