1 cuota de $36.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
3 cuotas de $13.053,48 | Total $39.160,44 | |
6 cuotas de $7.022,84 | Total $42.137,04 | |
9 cuotas de $5.035,62 | Total $45.320,55 | |
12 cuotas de $4.060,16 | Total $48.721,86 | |
18 cuotas de $4.767,40 | Total $85.813,20 |
6 cuotas de $8.241,31 | Total $49.447,86 | |
12 cuotas de $5.478,28 | Total $65.739,30 |
1 cuota de $36.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
2 cuotas de $20.957,81 | Total $41.915,61 | |
3 cuotas de $14.291,31 | Total $42.873,93 | |
6 cuotas de $7.793,01 | Total $46.758,03 | |
9 cuotas de $5.630,13 | Total $50.671,17 | |
12 cuotas de $4.562,61 | Total $54.751,29 |
1 cuota de $36.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
3 cuotas de $12.947 | Total $38.841 | |
6 cuotas de $6.912,13 | Total $41.472,75 |
3 cuotas de $13.052,27 | Total $39.156,81 | |
6 cuotas de $7.022,84 | Total $42.137,04 | |
3 cuotas de $14.782,57 | Total $44.347,71 | |
6 cuotas de $8.525,66 | Total $51.153,96 | |
9 cuotas de $6.852,23 | Total $61.670,07 | |
12 cuotas de $6.003,11 | Total $72.037,35 |
3 cuotas de $14.461,92 | Total $43.385,76 | |
6 cuotas de $8.244,94 | Total $49.469,64 | |
9 cuotas de $6.331,93 | Total $56.987,37 | |
12 cuotas de $5.477,07 | Total $65.724,78 |
Una niña de cinco años desaparece en condiciones misteriosas y el Pampa Bazán, subinspector de la Federal, recibe el encargo de encontrarla. El Pampa, entre otros nombres y apodos, es un rastreador solitario, y como tal camina. Está acostumbrado a meter la mano en la mierda -es su oficio- pero lo que le espera es largamente peor de lo habitual. Como en un juego de muñecas rusas, una dentro de otra, el destape de las figuritas lo obliga a una incursión en el horror. Un descenso a los infiernos del Dante sin un Virgilio que sea su guía. El escenario, protagonista en las mejores historias que se han narrado, es Argentina -durante el mundial de fútbol de 1978- cuando una dictadura genocida había dejado atrás todo límite ético y los muertos, torturados sin presunción de inocencia, eran leña para quemar en los basurales.
Advertencia: esta novela no da respiro. No perdona. El único descanso posible es cerrar el libro, algo que un buen lector no puede, ni se permite, siquiera pensarlo. Bienvenido a esta incursión en el horror, magníficamente contado.
Raúl Argemi