1 cuota de $23.115 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $23.115 |
3 cuotas de $8.244,35 | Total $24.733,05 | |
6 cuotas de $4.401,48 | Total $26.408,89 |
3 cuotas de $8.311,38 | Total $24.934,15 | |
6 cuotas de $4.471,98 | Total $26.831,89 | |
3 cuotas de $9.413,20 | Total $28.239,60 | |
6 cuotas de $5.428,94 | Total $32.573,66 | |
9 cuotas de $4.363,34 | Total $39.270,07 | |
12 cuotas de $3.822,64 | Total $45.871,72 |
3 cuotas de $9.209,02 | Total $27.627,05 | |
6 cuotas de $5.250,19 | Total $31.501,12 |
9 cuotas de $4.032,03 | Total $36.288,24 | |
12 cuotas de $3.487,67 | Total $41.852,02 |
1 cuota de $23.115 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $23.115 |
3 cuotas de $8.312,15 | Total $24.936,46 | |
6 cuotas de $4.471,98 | Total $26.831,89 | |
9 cuotas de $3.206,56 | Total $28.859,08 | |
12 cuotas de $2.585,41 | Total $31.024,95 | |
18 cuotas de $3.035,77 | Total $54.643,86 |
6 cuotas de $5.247,88 | Total $31.487,25 | |
12 cuotas de $3.488,44 | Total $41.861,27 |
1 cuota de $23.115 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $23.115 |
2 cuotas de $13.345,45 | Total $26.690,89 | |
3 cuotas de $9.100,38 | Total $27.301,13 | |
6 cuotas de $4.962,41 | Total $29.774,43 | |
9 cuotas de $3.585,14 | Total $32.266,23 | |
12 cuotas de $2.905,36 | Total $34.864,35 |
El vértigo del olvido. Peor, el vértigo de los recuerdos que llegan como en ráfagas. La necesidad de reconstruir o hasta de construir una historia a partir de retazos, de puros fragmentos de memoria suelta. Fernando Chulak se vale de ese vértigo para hilvanar la desventura de un hombre, su perro será su perro? y su mujer por dios, será su mujer?
El hombre en cuestión lleva una rutina hecha de vacíos de espacio y de tiempo. Sé que pensaba en algo dice, no sé en qué. Esa incertidumbre alimenta el enigma, se esparce en la voz, mientras el hombre mira a la mujer tan perdida como él que metió en su casa, y mira a su perro con la esperanza de que el comportamiento del perro, la memoria canina, le devuelva alguna revelación.
Fernando Chulak sabe trabajar con personajes solitarios, mujeres y hombres que arman una vida desde el pleno ensimismamiento y de la necesidad repentina de vérselas con el mundo de
afuera. Así lo hizo en Jauría, así lo hizo en Tilde, tilde, cruz. Ahora, a la soledad elemental, le agrega la desesperación de la mente que borra y anula recuerdos; la mente que se aferra, hasta donde puede, al instante que pasó. Y lo pierde.
Tres meses; un año, es una novela bellísima y estremecedora.
Mariano Quirós